Exposición conjunta de la pintora lituana, Dijana Kugiene y del arquitecto alemán, Thomas Fr. Harriefeld, desde el 7 de al 22 de febrero de miércoles a domingo (de 17.00 a 20.00 horas con entrada libre)
Recientemente, al alcalde de El Sauzal, Mariano Pérez y la concejala de Cultura, Candelaria Izquierdo, inauguraron la exposición conjunta de la pintora lituana, Dijana Kūgienė y del arquitecto alemán, Thomas Fr. Harriefeld, bajo el título: “La vida en colores”.
El acto se llevó a cabo en la propia sala del Ayuntamiento de El Sauzal en presencia de los autores protagonistas y del numeroso público que se dio cita en el espacio cultural. La exposición permanecerá abierta desde el 7 de al 22 de febrero de miércoles a domingo, en horario de 17.00 a 20.00 horas con entrada libre.
Para Dijana Kūgienė, la vida es un lienzo de colores. Un arco iris en el que se puede sentir y percibir cada color. Una mezcla de colores que dependen de nuestra actitud ante la vida. Ella plasma la vida en sus cuadros y juega con los colores, esa es parte de su creatividad. Sus obras recogen una amplia gama cromática que van desde los oscuros y sombríos, hasta los vivos y brillantes, pasando por los tonos pasteles, creando con ello obras evocadoras, oníricas e incluso inquietantes.
A veces, plasma imágenes realistas, pero a menudo los objetos se hunden en la niebla, en el tiempo, como si llevarán un velo de misterio. Los elementos de la naturaleza, el agua y la luz pertenecen tanto a la realidad como a los sueños. En sus pinturas mezcla recuerdos del pasado, de su infancia, del presente, de su imaginación. Lo que no se puede decir con palabras, a veces, se expresa mejor con colores. Es como dejarse llevar por una música sutil. Pintando desde su interior, permite al espectador descubrir, en su obra, el talante, el carácter, los pensamientos y los sentimientos de la autora. Las imágenes las pone la artista, pero la historia pertenece al espectador quien la contempla y observa, dejándose llevar por sus propios pensamientos y emociones.
En el caso del arquitecto especializado en el arte paisajístico, Thomas Herriefeld, es un enamorado de la isla de Tenerife, de su hermosa naturaleza y sus obras están inspiradas en el primor del volcán del Teide y sus colores. Sus pinturas no son copias, sino estados de ánimo capturados in situ. Su arte mezcla las confabulaciones alegres con el sentido de lo positivos y decorativo.
